Los pigmentos inorgánicos no utilizan carbono.
En su mayoría consisten en sales metálicas disueltas.
Los pigmentos inorgánicos se dividen en naturales (colores tierra) y colores minerales artificiales (colores metálicos, colores de carbón). La mayoría de los pigmentos inorgánicos son estables a Oxígeno. Esto los hace resistentes a la intemperie.